Bishoujo Team

Lamento la demora, todavía hay familia en mi casa y no me dejan de acosar Dx

Ehw, me quedó crack fic y bien tonto u_u los finales no son lo mío así que quedó algo abrupto. De todos modos espero que te guste y que no haya quedado algo malo por allí que quedes "¿pero qué...¡?" xDD


El mar se veía cristalino y azulino de manera tan profunda que cualquiera se podía perder en el de manera instantánea. Una chica de cabellos castaños observaba pacíficamente el inmenso océano desde la cubierta del barco pensando en las miles de cosas que podría hacer apenas llegara en su destino.  La joven correspondía al nombre de Shura  Rose y estaba en el Titanic para encontrarse en un viaje lleno de aventuras si bien tuvo que viajar con sus adinerados familiares que la limitaban mucho pero siempre podía escabullirse de ellos y encontrar entretención. Quién sabe si en este viaje podría encontrar al Jack que siempre había estado soñando.

La joven decide ir a su camarote para buscar un libro, estaba en ese plan para cuando choca con alguien en el camino. El choque provocó que ambas despistadas personas cayeran al suelo de madera.
-¡Disculpe!- Anunció prontamente la castaña.
-No te preocupes.- Responde un aturdido joven peliblanco sobándose la cabeza. Miró a la otra muchacha y le sonrió gentilmente. –Yo tampoco veía por donde caminaba.-
-Al menos ninguno quedó lesionado.- Sonrió con amabilidad Shura Rose, aceptando la mano que el otro joven le ofrecía para ponerse de pie. Le observó por unos instantes, tenía cabellera platinada y que bien cuidada melena, era un joven apuesto a pesar de los harapos que llevaba puesto. Sacudió con sus manos el vestido que ella usaba, uno de diseñador de muy buen coste. –Me llamo Shura Rose, mucho gusto.-
-El gusto es mío. Me llamo  Nerojack.-
-Vaya, jamás había escuchado ese nombre.-
-Es que mis padres no se ponían de acuerdo con el nombre así que prefirieron hacer una mezcla de los dos que les gustaba.-
-Jaja, ya veo.-

Ambos jóvenes comenzaron a caminar juntos mientras platicaban. Lo que Shura Rose jamás esperó fue conocer a una persona tan simpática como NeroJack en aquel viaje. Pasaban los días y no había minuto en que ambos jóvenes no se encontraran en algún pasillo, en algún salón e incluso se buscaban para encontrarse de casualidad. Al pasar los días la relación se fue fortaleciendo cada vez más hasta que nació un hermoso amor entre ambos jóvenes de mundos opuestos.

En una tarde, que ambos habían escapado de sus respectivos núcleos sociales se escabulleron a un camarote en donde NeroJack le sugirió a Shura Rose hacer un retrato de ella tal como Dios la mandó al mundo. Por supuesto, Shura Rose quiso ser retratada con el traje que más le gustaba; el se Chun Li. La joven castaña llevaba las mejillas sonrosadas mientras su joven y atractivo amigo la retrataba, por la mente de Shura Rose pasaban muchas cosas, sólo esperaba verse bonita para él.

-Ya terminé.- Dijo Nerojack con una bella sonrisa, de esas que le había dedicado cada vez que la miraba para trazar una línea.
-Quiero ver.- Shura Rose se levantó del pedestal donde llevaba posando una pose de guerra desde ya unas cuantas horas, ya sentía las extremidades entumecidas. Emocionada se acercó al peliplatinado para ver su dibujo. Fue en eso que la sonrisa se le esfumó como por arte de magia. Tres horas sin moverse y encontraba como resultado un palote de dibujo, con un par de abultados pechos en el palote y unos cuantos juegos de ¨gato¨ alrededor de la hoja. -¡Para eso te tardaste tanto!- Gruñó Shura Rose, molesta. Tomó sus prendas y se cambió en el baño del camarote.
-¡Lo siento Shura Rose!- El muchacho juntó ambas palmas en suplica. Mientras Shura Rose ya terminaba de ponerse la ropa dentro del baño–Jamás he sido un gran dibujante, sólo quería impresionarte como en la película (¿)-
-…- Shura Rose se quedó pensativa unos segundos, quizá estaba siendo muy tirana con él después de todo. Salió del baño e iba a decir algo cuando la puerta se abrió de pronto dejando ver a un chico de cabellera despeinada color castaño y una larga cola del mismo tono.
-Rayos, volví a equivocarme.- Miro al par que estaba adentro. –Supongo que he interrumpido un momento único.- Puso cara de asco.
-¡No es eso!- Se apresuró Shura Rose, ya molesta con todo lo que estaba pasando. Salió enojada del camarote dejando a Nerojack y al otro tipo atrás.

Para la cena ella había ido al comedor a una mesa donde sólo había una abuelita, era la típica ancianita amigable y dulce que da gusto estar en su presencia. Estaba cenando tranquilamente con ella cuando un tipo fantoche apareció de la nada y se apoderó del asiento libre.
-Para colmo no quedan más mesas libres.- Se quejó.
-¿Tú de nuevo?-
-Ah, la cachonda del camarote.-
-¡Shh!- Shura Rose se puso colorada, suplicando que la ancinilla no hubiese escuchado eso. Por suerte, ella seguía tejiendo sin darse cuenta de nada. –Quítate esa idea de la cabeza. ¿Me estás siguiendo o qué?-
-No te creas importante.- El castaño dio la última aspirada a su puro antes de apagarlo en un pastelillo de dulce.
-¡Oye!- Shura Rose lo miró enojada.
-Bah.- él tomó el cuchillo y tenedor comenzando a partir el bistec que le habían colocado en el plato. Comiendo tranquilamente.
-Oh, qué lindo muchacho me recuerda a mi querido esposo Billy.- Al fin la anciana notaba la presencia del otro. –Me acuerdo aquella hace cincuenta años cuando cuando yo y mi querido Billy nos tomábamos de la mano en aquel prado y...-
-Silencio anciana, trato de comer en paz.-
-¡Que mal educado!-
-Ni que me interesara escuchar como un par de viejos pasaban sus absurdos días en quien sabe en dónde. Prefiero lanzarme del barco.-
-¡La juventud de ahora!- La anciana se ofendió. –Discúlpame muchachita, pero no pienso seguir compartiendo mesa con un tipo tan desagradable.- La mujer se puso de pie tomando sus muletas y se retiró sin antes dedicarle una mirada de desaprobación al otro.
-Qué despreciable eres. ¿Quién demonios piensas que eres?-
-¿Bromeas?- El chico alzó una ceja, mirándola seriamente sin dejar de partir su bistec. –Soy SolCaleron. Heredero de importantes tierras y toda esa porquería de las que me puedo jactar. Soy un adinerado tipo a diferencia de tu noviecito el pobretón. ¿Cómo te llamas tú?-
-Shura Rose.- Le respondió sin bajar la guardia. -Hey, tu nombre…- Recordó el de Nerojack. –Es muy extraño.-
-Pues…- SolCaleron frunció el ceño con notorio enfado. –Los rufianes de mis padres no sabían que nombre ponerme… Mi padre justo comía una porquería de comida precocinada japonesa en ese viaje a Japón la marca era SolCamarón y por obvios motivos modificó unas letras. Fin de la historia, por cierto.. Tu nombre es bien idiota.-
-¡Oye! Al menos no me lo pusieron de una etiqueta de un producto. ¿Qué acaso los adinerados no ponen nombres más llamativos a sus hijos?-
-Me vale.-
-Damas y caballeros, la aclamada orquesta del gran barco.- Dijo un presentador quien seguidamente dio paso a la música de la esperada orquesta.
-Que linda melodía.- Shura Rose marcó una sonrisa en sus labios, embelesada por el ritmo de la orquesta. Vio como muchas parejas bailaban en el centro de la pista. –Parecen muy entretenidos.-
-¿Acaso el albañil que tienes por novio no te saca a bailar?-
-Eso no te importa.- Ciertamente desde que conocía a NeroJack habían bailado una vez pero en la zona donde él viajaba. No se quejaba del tipo de baile del chico, era muy entretenido, pero el que veía en frente suyo era ensoñador.
-Al parecer ese idiota no te ha sacado a bailar.- SolCaleron se puso de pie y tomó de la muñeca a Shura Rose haciéndola levantar de su asiento.
-¡Yo no quiero bailar contigo!-
-Cállate.-
Shura Rose podía esperar un baile desastroso de ese ogro adinerado, seguramente ni siquiera tenía buen tacto pero sorpresivamente ese no fue el caso. SolCaleron sabía bailar un buen vals como todo un señor de alta alcurnia. Shura Rose se dejó llevar por el momento y apoyó su rostro en el pecho de SolCaleron, éste se limitó a sonreír. La chica notó la gran joya que colgaba de una cadena de oro alrededor del cuello del moreno.
-Debe tener mucho valor.-
-Con esto podrías comprar una ciudad si quisieras, boba. Es una joya digna de un luchador como yo-
-…- Demasiado creído para ser cierto.
La noche transcurrió con normalidad y Shura Rose  se despidió de SolCaleron a regañadientes después de soportarlo casi toda la cena. Fue hasta la cubierta del barco, precisamente a la proa de este y se quedó observando el oscuro mar en silencio.
-Baila bien ese tipo, ¿no?- Era NeroJack que aparecía detrás de ella.
-Oh, Nerojack… Lo has visto.- Shura Rose se sintió culpable. –No quise hacerte sentir mal.-
-No te preocupes, debo admitir que baila bien.- Sonrió.
-¿Sólo eso? ¿Qué soy buen bailarín? Deberías decir que soy un sujeto sobresaliente y mejor que tú, al menos.- Agregó SolCaleron apareciendo en el acto también.
-¿¡Me estás siguiendo o qué!?-
-Que odioso sujeto.- Nerojack giró los ojos. –Es como un bicho molesto.-
-El bicho serás tú, seguramente te la pasas en la basura como cucaracha por un poco de comida.-
-Al menos soy más interesante para Shura Rose que tú. Viejo feo.-
-¿Viejo feo?- SolCaleron alzó una ceja. –A ver, ¿En dónde  ves lo viejo y lo feo?-
-Ehw..- NeroJack se encogió de hombros, había dicho un insulto muy infantil. –Pero dentro de algunos años serás viejo y calvo como el actor que personificará tu rol (¿)-
-¿Estás fumado o qué?-
-Por favor ya paren.- Shura Rose se estaba cansando de las peleas de esos dos.

Mientras tanto, en la sala de control de mando. -¡Capitán, nos estrellaremos contra un iceberg!-
-¿Por qué no nos enteramos de esto antes?- El capitán empalideció -Diablos. ¡Preparen los botes! Asegúrese que las damas y niños tengan prioridad.-   

-Es evidente que deberías optar por mí, soy la mejor opción que tienes Shura Rose.-
-Ella estará conmigo, somos el uno para el otro.-
-¡Ya basta! Los dos me están colapsando y ni siquiera hemos hecho la clásica escena de la punta del barco.-
-Oh, sí.- Nerojack sonrió torpemente. –Esa me corresponde.- El joven tomó la cintura de Shura Rose y ella extendió los brazos, ambos dejándose envolver por el momento pero como era lógico fueron interrumpidos.
-Yo lo hago mejor, quítate.- SolCaleron le dio un empujón a Nerojack para correrlo pero el otro joven no se dejaría vencer tan rápidamente. Comenzaron una lucha entre ambos dejando a Shura acorralada, la chica estaba más que molesta de tener que soportar a ese par que se comportaba como críos así que estaba dispuesta a marcharse pero recibió un manotazo accidental de SolCaleron que la mandó de la cubierta del barco al agua.
-Vaya, debería medir mi fuerza.-
-¡Mira lo que has hecho!- Sin pensarlo dos veces NeroJack se lazó al mar para ayudar a Shura Rose.
-No serás el héroe.- SolCaleron hizo lo mismo y en un instante los tres estaban flotando en el congelado mar.
-Shura Rose ¿Estas bien?- Preguntó NeroJack.
-…Algo así.-
-¿Entonces por cual de los dos te decides?-
-He decidido…-
-…- Ambos la miraban ansiosos, con curiosidad.
-Que ser soltera no es malo.- Rio haciendo una V con un par de dedos. –No se lo tomen a mal, pero son demasiados infantiles.-
-Pfff, mujeres.- Sol giró los ojos –Ya te dije yo que no debías entregarte a una, yo te lo advertí.- Mirando a NeroJack
-¿Eh? ¿Cuándo me dijiste eso?-
-¿Y ahora qué?-
-¡¡Miren!!- NeroJack apuntó horrorizado el barco que acababa de partirse en dos y comenzaba a hundirse. –Nos hemos salvado de eso.-
-Pero que idiota eres, estamos de todos modos en un mal panorama. Nos congelaremos si no hacemos algo.-
-Debemos buscar un modo de salir de aquí.-
-Ya se me ocurre como, esperen aquí.- SolCaleron vio una tabla de madera flotar en el mar. Nadó hasta ella y se subió allí –Problema solucionado.-
-¡Fuera de aquí pedazo de escoria!- Gruñó una ancianita que se aferraba al otro extremo de la tabla.
-Tranquila señora, podemos compartir.- SolCaleron reconoció a la mujer como la anciana de la cena pero estaba algo cambiada, los ojos completamente negros los dientes puntiagudos y las extremidades medias dislocadas, esas características no las había visto antes. -¿Le pasa algo?-
-¡Te aniquilaré!-
-¡¿Pero qué mierda?!- El moreno se quedó atónito cuando la anciana se puso de pie en la tabla y sin caminar avanzó hacia él para atacarlo. No le agradaba la vieja pero no quería atacarla, iba en ese plan hasta que la vieja le empezó a pegar frenéticamente con la muleta y…a girar su cabeza sin control. No tuvo más opción que quitarle la muleta y darle con la misma para lanzarla al agua. Usó la misma muleta como remo para llegar hasta el otro par quienes no dudaron en subir.
-¿Esa no es la muleta de la señora de la cena?- Preguntó Shura Rose
-Ya no la necesitará… Supongo.- SolCaleron se encogió de hombros mirando de reojo hacia atrás y viendo como la vieja salía del agua trepándose a una maleta y dedicándole improperios.   

A lo lejos los tres miraban con dolor como ese gran barco en donde tanto se habían divertido comenzaba a hundirse con toda la gente. Ellos habían corrido con algo de suerte por el momento.
Cuatro días de naufragio bastaron para que llegaran a una isla, suplicaban porque hubiera personas y recursos allí pero después de un recorrido en donde los tres estaban ya muy andrajosos no se encontraron con nada.

-¡Estamos perdidos! Llegamos a una isla desierta sin nada ni nadie.-
-Joho ¿Estás seguro?- Un sujeto apareció detrás de una palmera. Se acercó a ellos caminado a pasos gigantes y de una manera muy peculiar. Tenía una barba extraña y los ojos remarcados en  negro.
-Lo que faltaba, un marica travesti.- SolCaleron arqueó una ceja. –Y como está solo seguro querrá un poco de acción.- Le dio un empujón a NeroJack haciéndolo que chocara con el sujeto extravagante. –Su trasero a cambio de comida.-
-¡Hey!- Nerojack se espantó por el trueque.
-Jajaja, ya me lo han dicho antes.- Río el tipo. –Soy Jack Sparrow. Dueño de estas tierras, al menos temporalmente, dueño del perla negra y de la tripulación más temida de los siete ma---
-¡Mira tiene pollo!-
-Y cuanto ron-
-¡Comida!-
Los tres chicos notaron una mesita lista un poco más allá a la cual asaltaron sin preocuparse de modales. –Bueno, era la cena de mi amigo y su novia pero seguro que no les importará.- Fue hasta allá también, empinándose una botella de ron en el camino.

Después de disfrutar de la hospitalidad de Jack Sparrow, los chicos se embarcaron en el perla negra con la condición de ser parte de la tripulación del pirata. Tras un largo viaje llegaron a puerto inglés donde saquearon unas cuantas casas. Iban en el bote en dirección al perla negra.
-Gran botín que nos hemos llevado, ¿no muchachos?- Dijo Jack Sparrow.
-¿Dónde está Shura Rose?-Preguntó NeroJack semi-tocayo de Jack Sparrow.
-Creo que ya está en el barco.- Dijo otro pirata. -¿Se está despidiendo?- Notó como la otra sacudía la mano. 
-Hm…- SolCaleron agudizó la vista y más allá veía a Shura Rose despedirse de ellos agitando su mano con algo en ella. -¡Ladrona!- Gruñó al reconocer su joya en sus manos.
-Ya, tranquilo… Quizá sea una bromita.- Dijo Jack Sparrow con una sonrisa confiada la cual se borró cuando vio que su barco, su amado perla negra, comenzó a alejarle. -¡Detengan a esa ladrona!-

Y así de este modo, Shura Rose se convertiría en la pirata más temida de los siete mares y la cual, cuenta le leyenda, desbarató a Jack Sparrow de su amado perla negra.