Uo! *Pose*
El GM ha ganado, el fin del mundo y la muerte es segura para todos los jugadores, no hay nada que hacer. ¿Unas últimas palabras de despedida?
Shura * Sol * JoJo
-Entonces… ¿ya esta?
En el cielo del mundo del RPG, el gran contador rojo corría hacia atrás. Lo habían llamado “el reloj del fin del mundo”, y apenas quedaban veinte minutos para que borrara sus existencia, tanto del mundo virtual como de de fuera, el mundo real. Las ciudades habían empezado a caer, les habían robado sus habilidades y eran como en el mundo real, ya no podían correr sin agotarse, ni lanzar hechizos, ni blandir enormes espadas. El juego se había acabado.
-¿Y qué más nos queda por hacer, Sol? -Shura se sentó en el suelo, había pasado por todas las etapas, negación, ira, incluso intentó negociar con el GM su salida del juego, ahora mismo estaba más deprimida que resignada.
Sol la tomó de la pechera de su uniforme de Champion, levantándola como si fuera una muñeca de trapo, sin que se resistiera, mirándole a los ojos mientras el Paladin temblaba de ira.
-¿Qué más nos queda por hacer dices? ¡Atacar! ¡No nos queda tiempo!
-¡Eh! ¡Déjala! Sólo esta triste, como todos nosotros -JoJo intervino, Shura lo escuchaba muy lejos, removiendo algo de su interior.
“¿Cuándo he permitido a los demás hablar de cómo me siento? Antes esto me enfadaba…”
Sol la sacudió esperando una respuesta o una reacción, cuando renunció a convertirse en Priest por hacerse Champion las cosas se habían tensado entre ellos, pero ella demostró que había hecho la elección correcta, brillando como un diamante, lanzándose ante el peligro y sacudiendo su conciencia con sus palabras. Sol jamás iba a olvidar lo que ella le dijo el día en que Nero murió definitivamente por salvar su vida.
-Cobarde -lo había cambiado tanto, lo había hundido y lo había rescatado, quizás no mejor, pero sí más fuerte, ¿y ahora ella tiraba la toalla? Estaba tan decepcionado que no quería saber nada más de ella.
La soltó, ayudada por el brazo de Joseph para mantenerse de pie, el Stalker había pensado en todo lo posible, agotando sus trucos y su ingenio, agotado porque lo último que le había dicho a su mejor amigo, Caesar, no había sido más que una estúpida discusión; un dolor que le acompañaría para siempre. Pero no quería que Sol y Shura terminasen igual.
-Oír, no sabemos lo que va a pasar… pero esta claro, que esto no es lo último que queremos decirnos ni escuchar de los otros, voy a empezar yo: si tengo que morir, me alegra hacerlo al lado de amigos, y si no nos vemos al otro lado, quiero que sepáis que os echaré de menos -parpadeó con fuerza para que las lágrimas no salieran, inclinando la cabeza hacía atrás -,gracias por todo.
Sol permaneció impasible, mirando primero a Shura y después a Joseph, iba a decir algo, a pedirles perdón por no haber sido más fuerte y haber acabado con el GM; quería estrechar la mano con JoJo, darle un golpe en el brazo y sonreírse para recordarle lo cabrón que era y lo estúpidos que habían sido todos los planes que les habían salvado el culo más de una vez; quería un momento a solas con Shura para decirle…
Pero la cabezoneria se impuso, dando media vuelta sin mediar una palabra. Sacando su espada mellada y poniendo rumbo a la ciudad.
Shura se sentó en el suelo, vacía. Joseph se sentó a su lado, pasó un minuto sin que ambos dijeran nada, hasta que Shura notó como el chico le picaba en el hombro, había abierto la Omnitool y le pidió ayuda a Shura para grabar un mensaje.
-No sé… quizás llegue al exterior, me gustaría decirle algo a mi abuela… mi abuelo murió antes de que mi padre naciera, y su hijo antes de que naciera yo, los dos de manera repentina… parece una maldición, ¿eh?
Shura no sabía qué decir, observando como JoJo grababa el mensaje.
-¡Hola abuela Erina! -Había empezado con un tono demasiado jovial para la situación, reflexionando en un momento todo lo que quería decir, y descubriendo que era demasiado, pero que todo se podía decir muy rápido -.Te quiero.
Le acercó la Omitool a Shura.
-¡Venga! ¡Dile algo a mi abuela!
Shura balbuceo, casi olvidando de cómo se hablaba, pero la Omnitool seguía grabando.
-¡H-hola abuelita Erina! -Se sentía muy tonta por sentirse avergonzada, ni siquiera estaba hablando con ella en persona ni sabía si el mensaje iba a llegar -.¡Muchas gracias por educar a su nieto! JoJo es… genial, nos ha ayudado siempre, ¡es una gran persona! Y nos ha hablado mucho de usted, ¡todos aquí la queremos Erina! Y… eso…
No habían sido sus mejores palabras, y lo último había sido tan idiota… pero JoJo parecía satisfecho, cerró la Omnitool abrazando a Shura, se sentía muy reconfortada.
-Gracias.
Quedaban cinco minutos…
-¿Crees que Sol sigue en la ciudad?
-Era su última vida… se ha agarrado a ella durante años, puede que aun lo siga haciendo.
-JoJo… -Shura se puso en pie -y-yo… tengo que ir a decirle algo.
El chico dibujó una sonrisa, poniéndose en pie y sacudiendo sus pantalones con las manos.
-¿Qué propones?
-V-vamos al ataque… -Era probablemente la última vez que lo diría, pero era justo lo que el chico quería escuchar.
-Vamos entonces.
Salieron a la carrera, el fuego y el humo de la ciudad era tan espeso que con sólo acercarse ya hacía que les picaran los ojos.