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MMORPG: Neverland / Re: neverland 0.0: you can (not) remember
« Last post by Airin on January 31, 2024, 09:48:03 AM »
Vengo a dejar aporte y me vuelvo a la cama que estoy fatal de mi virus por determinar x_x



~+0.76~

La puerta de la tienda se abrió, madera contra campanillas creando un sonido agradable que avisó al dueño de que tenía clientes. Aunque el hombre no se movió de la silla donde descansaba, barbilla en pecho y brazos cruzados, con los tobillos sobre la mesa que tenía enfrente.

—Buenas tardes, señor Sombrero. —dijo la mujer que acababa de entrar al establecimiento, con un tono coqueto.

Urahara suspiró, apartando el gorro de su cara y abriendo un ojo.

—Creía que mi nick era Getaboushi, ¿ahora no tengo derecho a sandalias? —preguntó mientras se enderezaba.

La mujer, levantando una mano con gracia, señaló hacia sus pies desnudos.

—No soy yo quien te ha acortado el nombre de usuario, has sido tú mismo. —contestó entretenida con la interacción.

Urahara chistó, poniéndose de pie y calzándose antes de apoyarse en el mostrador de la tienda y bostezar con ganas.

—¿Qué puedo hacer por tí en esta lenta, lenta tarde?

Ella sonrió otra vez, llevándose un dedo enguantado a los labios.

—Creía que tenía un encargo, ¿no está preparado? —quiso saber, ladeando la cabeza— Puedo volver en otro momento si estás tan ocupado.

Urahara apoyó la lengua contra el interior de la mejilla antes de mirar hacia todas partes en su tienda. En su vistazo sólo encontró muchos cachivaches, pero ni una sola alma aparte de ellos dos. El tendero palmeó el mostrador y sacó una libreta que tenía guardada en un cajón.

—Veamos. —dijo antes de ponerse las gafas y arrugar la nariz— Si encargaste algo debes de estar aquí.

Getaboushi levantó una mirada una vez más, pero ahora para comprobar el nick de la persona con la que estaba hablando.

—Purple Rose. —dijo ella, quitándose un guante dedo a dedo. Y luego el otro.— Me han dicho que tu tienda es de los mejores sitios… si quieres ciertas cosas. Espero que no me decepciones.

Urahara le dedicó una sonrisa rasgada y volvió a mirar su lista de clientes. Ah, ahí estaba, Purple Rose. Su encargo se trataba de cinco pociones de mejora de daño Electro y un par de runas más bien peculiares. Urahara recordaba haber estado trabajando en esas runas todo el fin de semana.

—Sí, aquí estás. Una bruja con un gusto peculiar.

Purple Rose empezó a caminar por la tienda. Cada paso previamente calculado para maximizar el movimiento de sus caderas. Acarició un reloj de arena, mirándolo con intensidad.

—Oh, vamos. No todo lo que pedí es para mi uso personal. —Se giró sobre sus tacones y levantó una ceja— ¿Está listo?

Urahara asintió antes de guardar la libreta.

—Sí, señora. En un momento le saco su pedido.

El tendero no tardó mucho en entrar, localizar el pedido y volver a salir con una bolsita más bien discreta.

—Sus pociones. —anunció antes de añadir un bolsito de terciopelo a la bolsa— Y un extra. Hay que mantener a los clientes contentos para que vuelvan.

Purple Rose señaló el reloj de arena, preguntando cuánto costaba y si podía añadirlo al pedido. Después de terminar su transacción, la mujer se despidió con el mismo tono coqueto con el que se había presentado.

—Muchas gracias por el… extra. Espero que valga la pena.

Urahara se volvió a sentar en la silla donde había estado cuando Purple Rose había aparecido, y se descalzó para poner los pies en la mesa cercana.

—Oh, te aseguro que sí.

Después de todo, Urahara estaba muy seguro de la calidad de sus productos.

—Si es así, estaré encantada de seguir haciendo negocios en esta tienda. Adiós, señor Sombrero.

Urahara se miró los pies y chistó antes de colarse el sombrero hasta la nariz y seguir con su siesta. Aunque cuando oyó las campanitas volver a tintinear sonrió. Estaba seguro que acababa de fichar a otro fiel cliente.



—¿Te ha llegado el regalo que te mandé? —preguntó Lisa, jugando con una rosa entre sus dedos.

Urahara no tenía ni que mirar su inventario para saberlo. Lisa era una cliente que siempre pagaba a tiempo, pero se paró unos segundos para echar un vistazo y poder decirle que sí, que le habían llegado los materiales que tan amablemente le había enviado.
Aunque los dos sabían que en realidad se refería a la transferencia bancaria que Urahara había recibido ayer. Con dinero real.

En el juego estaba terminantemente prohibido demandar pagos con dinero real por objetos del juego. Y por eso en el negocio de Urahara siempre usaban frases en clave para que no le pillaran los mods.

—Me alegro, no me hacían falta esos materiales y como tú eres siempre tan generoso… —comentó Lisa con una risita al final.

Urahara rodó los ojos.

—Mujer, es fácil ser generoso con alguien que me pide tantos encargos. ¡Dar y recibir! ¿No es maravilloso cuando la vida alcanza el balance perfecto?

Lisa se volvió a reír, tapándose los labios con sus dedos largos.

—¡Dar y recibir! —le contestó ella antes de negar con la cabeza— Hablando de eso, ¿cuándo recibiré mi último encargo?

Urahara miró hacia la trastienda y luego hacia su amiga y cliente, Lisa.

—En unos días, tengo mucho que preparar. De todas maneras, ¿para qué quieres todo eso? —preguntó Urahara con curiosidad, parecía que Purple Rose se estuviese preparando para una guerra— ¿Hay algo que sepas y no has compartido conmigo?

Lisa le ofreció la rosa a Urahara y este la aceptó.

—Hay muchas cosas que sé y hay muchas cosas que sólo intuyo. Pero nunca está de más estar preparado. ¿verdad?

Getaboushi asintió y se despidió de Purple Rose, esperando verla en un par de días, horario del juego. Luego se dirigió a la trastienda donde estaba su taller, rosa en mano y una vez sentado y con su lupa de trabajo sobre el ojo bueno, empezó a leer el código que Lisa había inscrito en la rosa púrpura que le había entregado.

Unas horas después Urahara levantó la cabeza y destruyó la rosa en una miríada de píxeles. El mensaje le había dejado con muchas dudas pero una cosa clara. Igual no era mala idea prepararse para una guerra.

—Me cago en la puta. Y yo que quería un domingo tranquilo.


.
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Listas y Probaciones / Re: New Probation Time!
« Last post by Cho on January 26, 2024, 05:16:25 PM »
Hola a todas, siento mucho la tardanza. Vengo a anunciar que el stop sign será dejado el miércoles 31 de enero a las 10:00pm hora México d.f.

Countdown
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Reglas, Guías y whatnot / Re: Canje de palabras
« Last post by Cho on January 26, 2024, 11:25:49 AM »
Sí, ya registré tu canje y tienes tus espacios del reto así que cuentas con seis extras. Que los disfrutes~
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Reglas, Guías y whatnot / Re: Canje de palabras
« Last post by Mimi Tachikawa on January 26, 2024, 12:09:47 AM »
Ya entonces puedo pedir mis 6 extras en total????
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Downtown District / Re: Act 1: Overture
« Last post by Miyu on January 25, 2024, 04:39:59 PM »
La playlist que usé es la que hizo el/la mangaka de "The Guy She Was Interested in Wasn't a Guy At All" vol. 2 (?) y el opening de Mashle de esta tempo LOL



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La música se oía a través de los parlantes de la tienda, junto al aire acondicionado y las cajas de CD’s siendo acomodadas en las estanterías. La transición de una canción a otra es tranquila, al igual que el ambiente del lugar. Pocos clientes iban ya a comprar en formato físico los álbumes y vendían más en línea.
Mitsuki en el mostrador, comenzó a pintarse las uñas de negro, el olor a esmalte hizo que su compañero de trabajo tosiera, pero seguía ordenando la mercancía con cuidado.

—Mi hermana me vendrá a recoger en poco —el hombre se acercó al mostrador con una cara totalmente rancia, a juego con su voz rasposa— ¿Puedes poner algo más femenino?
—¿Femenino? —levantó ambas cejas con sorpresa y después miró el ordenador de dónde había puesto la playlist—. ¿Qué es femenino?

La chica parecía totalmente nerviosa, con gotas de sudor frío recorriendo su cara, probablemente si no usara mascarilla se vería ridícula.

—Femenino, femenino, femenino —repitió Mitsuki varias veces, rascando la parte posterior de su cabeza. Sus cabellos cortos le permitían sentir el fresco de la habitación.
—No sé, algo de alguna Idol —Gyutaro sacó su móvil y Google rápidamente, traía el mismo color de uñas que Mitsuki—. El otro día Ume se quejó llamando vejestorio a la música de aquí.
—Bro, es una tienda de Rock —señaló un poster de Nirvana detrás de ella—. A duras penas tenemos algo de Maneskin y Mammoth WVH y este último porque toca el hijo de Van Halen.
—Busca en YouTube o en Spotify —el chico se sacó el delantal negro para dejarlo sobre el mostrador.

Después de poner Spotify el top de canciones de Japón, presionó la primera canción de Creepy Nuts. En ese momento la campanilla de entrada sonó, alguien ingresó a la tienda, el suave y delicado sonido del campanilleo se sobrepuso sobre el extraño rap oriental que sonaba a todo volumen.

Mitsuki apuntó sus ojos a los azules de Gyutaro, ambos entraron en pánico, esa canción estaba alejada del sonido femenino que ambos buscaban para hacer que la mimada hermana menor de él se sintiera más cómoda.

“Oye Espejito, espejito di quién es el mejor.
 Pues soy yo,
Oh yeaah Mientras permanezca vivo lejos iré
Hasta el número uno ser
Cantando
Bling-Bang-Bang, Bling-Bang-Bang-Born
Cantando
Bling-Bang-Bang, Bling-Bang-Bang-Born
Cantando
Bling-Bang-Bang, Bling-Bang-Bang-Born
Hasta el número uno ser”


—Viejo… ¿ESO TE PARECE FEMENINO? —Gyutaro saltó sobre el mostrador para intentar pausar la canción.
—¡QUÉ SE YO! ¿POR QUÉ ERES TAN MOLESTO? —Mitsuki, al igual que él, fue rápido al mouse. Ambos se pegaron contra la pantalla de la computadora.

En ese instante la voz femenina de una chica carraspeó para llamar la atención de ambos, se veían totalmente ridículos. Entre empujes y los movimientos que hacían sobre el ordenador, terminaron poniendo más alto el volumen de la música y el “Bling-Bang-Bang-Born” sonando agudo.

—¿Qué hacen? —puso sus manos en jarra y los miró con sus filosos ojos azulados, aún con las cejas cruzadas se veía hermosa—. Hermanito, aléjate de esa marimacha.
—¿Yo? —se señaló así misma Mitsuki, dejando caer un poco su cubrebocas. Parecía muy sorprendida.
—¡Ume! —la regaño su hermano, tratando de contener la risa—. Bueno, nadie te manda a vestirte como tomboy, Koga.

Después de unos minutos volvieron a la vieja lista de canciones, que ya casi terminaba de sonar 1979 de Smashing Pumpkins y comenzó a sonar Foo Fighters con My Hero, Mitsuki cerró sus ojos para oír los acordes de la guitarra y una pequeña sonrisa se formó entre sus mejillas.

Los dos hermanos salieron de la tienda de música, Ume iba sujetando el brazo de su hermano mayor. Pese a llevarse tres años ambos tenían una buena relación y el hermano mayor siempre mima demasiado a la menor.

—¿Música femenina? —Ume alzó su vista hacia su hermano—. Eso sería Pop, quizás Doja Cat. Uhmmm… últimamente escucho Kura Kura de TWICE o BLACKPINK.

Ume llevó sus uñas finamente esculpidas, con un diseño rosado y algunas flores dibujadas con pequeños diamantes falsos incrustados hacia sus labios para pensar en lo que Gyutaro se refería con “música femenina”.

—¿Dua Lipa? —mordió con delicadeza la uña del dedo índice e inclinó ligeramente su cabeza, sus largas hebras doradas con las untas limas se movieron de una manera suave con ella.

En ese momento ambos hermanos vieron una cosa dorada saltando sobre la menor de los Shabana y abrazándola fuerte.

—¡UMECITA! —gritó quién impacto contra ellos, abrazando a la chica con fuerza. El movimiento hizo que ambos hermanos se alejaran entre sí—. Tiempo sin vernos, ¿cómo estás? ¿Mitsu chan está en la tienda?

De inmediato ambos reconocieron a la hiperactiva de Marin Kitagawa, ambas chicas median casi lo mismo y traían sus cabellos sueltos.

—¡Aléjate! —contiguo dijo la albina—. ¡Aléjate, Marin!
—Hermana —Gyutaro suspiró ante la mala actitud de su hermanita.
—¡Nada de hermana, me está arrugando el uniforme! —Ume parecía molesta e intentaba alejar la cara de la otra mujer de encima—. ¡Quítamela!
—No quiero, jeje —se reía con la cara pegada a la de Ume—. Tan linda y gruñona.~

Gyutaro no entendía cómo es que su hermana había podido hacer tantas amigas desde que llegó a Eastwood, aunque siempre tenía que tener cuidado con los hombres que se le confesaban a ella.

—Koga está en la tienda aún —respondió el hombre, señalando en dirección a dónde trabaja.
—¿Lo dices en serio? —Marin parecía totalmente emocionada y abrazó un poco más fuerte a la chica—. ¡AHHH, AL FIN LA VERÉ! Aunque cruzarme con Yori chan sería bueno también.
—¡HERMANITO! —los niveles de odio de Ume rayando el límite, pidió ayuda a su hermano.
—¡Oh sí! —Marin se alejó unos centímetros de ella y de su mochila rojiza, marca Supreme, sacó una bolsa con el logo de 6%DokiDoki—, espero les guste —la sonrisa de ella se amplió bastante y miró a Gyutaro también.

Ume la tomó con cierta curiosidad, sus ojos se agudizaron un poco y Marin le acarició la cabeza.   

—¡Te dejaré hacerlo por esta vez, hmph! —movió su cabeza hacia un lado, inflado sus mejillas, pero sin agradecer por el obsequio.
—Gracias —apresuró a decir Gyutaro—, y perdón por ella.
—¡HERMANO! —protestó ella.
—No te preocupes, es bien linda —la rubia le acarició por algunos minutos más la cabeza y después se despidió de ambos para ir hacia la tienda de CD’s.

Marin se había puesto unos shorts de jeans cortos, junto a una camiseta corta con una estampa de Nirvana en ella, se veía bastante linda. Respiró hondo profundo antes de ingresar a la tienda y, con la mejor sonrisa, se apresuró al mostrador.

Al detenerse frente oyó las notas y la voz tenor que reproducía los parlantes del local, el conjunto de notas y acordes hacían de la canción algo nostálgica.

—La voz de Brandon Boyd me hace estremecer —susurró la platinada, intentando tararear Drive.
—“Whatever tomorrow brings. I'll be there With open arms and open eyes, yeah. Whatever tomorrow brings. I'll be there I'll be there, yeah, ohh” —Mitsuki cantaba bajo el mostrador, mientras ordenaba algunas cosas que se cayeron cuándo con Gyutaro intentaban apagar la canción de Creepy Nuts.
—Me gusta Incubus —Marin se hizo hacia delante del mueble, apoyando sus brazos en la parte de arriba, para ver a la mujer del otro lado—. Tiempo sin vernos, Mitsu-chan.
—Sí, Kitagawa —ambas se rieron y la mencionada apoyó su mochila grande se Supreme sobre el mostrador de la tienda—. ¿Cuándo regresaste de tu viaje a Japón? Hace poco Ume estuvo en la tienda.
—La vi —respondió emocionada—. ¡Fue todo un espectáculo! La abrace el doble.
—Imagino que casi te golpea —dejó escapar una pequeña risa y se acomodó en la silla.
—Sí, sí —asintió rápidamente—, Debería dejar de ser tan linda si no quiere que la abrace.

El grupo de amigas se había formado en la Universidad, al ser japonesas todas era normal que terminaran entablando amistad. En su grupo había demasiado chicas: Haru, Yori, Ume, Matsuri, Harumi, Yuzu, Mei, Mitsuki, Aira, Musashi, Marin, Nobunaga, Souji, Okuni, Yuzuriha y Sagiri, todas en especialidades diferentes y con pocas clases compartidas, sin gustos en común y aún así se habían hecho muy buenas amigas.

—Volví ayer —confesó Marin, buscando en su mochila un regalo como suvenir—. Traje regalos para todas las chicas. ~
—Espero que no sea maquillaje —se volvió a reír la pelinegra, quitándose el delantal de trabajo de la tienda—. Pronto cerraré, ¿quieres ir a comer algo?
—¡Crepas! —respondió de inmediato.
—¿Eh? -la miró sorprendida, pues fuera de Japón no había locales de crepas—. Vamos al Starbucks.
—Ah, cierto —le entregó una bolsa de A Bathing Ape—. Ojalá te guste.
—¿BAPE? —tomó la bolsa y le dio una ojeada, viendo una camisa de Denim—. Gracias, no te hubieras molestado.
—Tuve que hacer varios trabajos en Harajuku y conseguí descuentos en varias tiendas —acomodó las cosas de nuevo en la mochila y la cerró.
—¿Te fue bien? Últimamente estoy viendo varios spots publicitarios tuyos en la televisión e internet.
—Sí, incluso me hicieron fotos para revistas de Gal’s allá —emocionada, infló su pecho. Aunque su trabajo en el mundo de la moda no era más que para sustentar sus hobbies como otaku.
 
###

—Ume, se más amable con tus amigas —Gyutaro se palmeó su propia frente al ver que su hermanita golpeó con el bolso a Yuzuriha y Sagiri entró en pánico.
—¡Es culpa de estas estúpidas por creer que me pueden tocar! —volvió a impactar su bolso contra la cara de Yuzuriha.
—¿Estás bien, Yuzuriha-san? —preguntó Sagiri, tomándola del hombro.
—¡Sagirin! —fingiendo que le dolió, apoyo su delicado rostro entre los pechos de la mujer más alta.
—¡PERVERTIDA! —Ume miró a través de las mentiras de ella y la golpeó de nuevo para alejarla de Sagiri—. Hermano, definitivamente Yuzuriha no es mi amiga.
—Esto… —Sagiri se quedó quieta, observando como Yuzuriha quedó en k.o. en el suelo por los ataques de la albina. Sagiri media 1.72 cm, mientras que Gyutaro 1,80 cm—. No seas tan dura con ella, Ume-san.
—Eres demasiado buena con esa pervertida, Sagirin —con el entrecejo aún cruzado, se colocó su bolso en el hombro y tomó el brazo de su hermano—. Por eso es que ella hace lo que quiere contigo.
—¡Phew! ¡PERO ELLA ES MÍA! —exclamó Yuzuriha, besando la mejilla de la otra mujer e imitando el gesto de Ume al agarrar el brazo de su pareja.

Gyutaro se rascó con su mano libre la mejilla, en sí le daba envidia ver a una pareja tan linda demostrando su cariño en público.

—Yuzuriha-san, nos ven —susurró apenada Sagiri.
—¿Oh? —levantó su mano Marin—. ¿Están por aquí aún?
—Kitagawa-san —Sagiri les sonrió a las dos chicas que venían en dirección contraria a ellas-. Koga san.
—Viejo, no quiero verte después del trabajo —Gyutaro miró apático hacia la tomboy.
—¿Eh? —Mitsuki se puso nerviosa nuevamente, tras de ella traía el estuche con la guitarra—. Me pides cosas imposibles, Shabana.
—Vamos a Starbucks, ¿vienen? —emocionada, Marin fue hacia los otros cuatro e hizo lo mismo que con los demás, busco en su mochila regalos para las dos chicas.
—¡Quiero! ¿Me pagas Sagirin? —con ojitos de cachorrito mojado, viró hacia la mujer.

La otra chica tragó saliva y sacó su billetera de los bolsillos de su pantalón, haciendo cálculos mentales para saber cuántos dólares gastaría en una bebida y alguna botana, mientras tantos la charla de las mujeres y el hermano mayor de Ume seguía su curso.

—¿Querías ir a comer crepas? —Ume seguía sujetando el brazo de su hermano-. Hay una confitería que vende helados y crepas.
—¿Sí? —la sonrisa de Marin volvió a aparecer y estuvo a punto de abrazar a la albina, sino fuera por Mitsuki que agarró a su amiga del cuello de la parte posterior de su camiseta.
—Si haces eso se armará un nuevo espectáculo y no creo que Sagirin lo soporte —le susurró la tomboy.
—Oye, parece que pagaras mi helado —Yuzuriha volvió a besar la mejilla de su pareja para llar su atención.
—¿Helado? —regresó a mirar su cartera y a contar su dinero.
—Pagaré yo —finalmente suspiró Yuzuriha, mostrando en su celular el monto que tenía en el banco.
—Paga el mío y el de mi hermano, pervertida —Ume le dio un golpecito en el hombro y dijo seriamente.
—¡Crepas gratis! —Marin se sumó al pedido de la albina—. ¿Verdad Mitsu chan?
—Lo siento Yuzuriha —le susurró Mitsuki, tratando de atarse sus cabellos en la parte posterior. La tarde era muy calurosa.
—Está bien, está bien —suspiró la de cabellos cortos y guardó el móvil en su bolso—. Pagaré, pero no se acostumbre que no tengo dinero de sobra…
—Si eres una gran gimnasta, no te hagas la pobre —Ume levantó su mochila para amenazarla con pegarle.
—¡N-no siempre! —se cubrió detrás de la altura de Sagiri.
—Tu hermanita es muy abusiva —Mitsuki se acercó a Gyutaro y le mostró su celular, había hecho una pequeña playlist de canciones que consideró femenina.
—No conozco ninguna —encogió de hombros el único hombre del grupo. Tras escuchar que su hermano habló, Ume señaló a Mitsuki algo furiosa.
—¡Aléjate de mi hermano, TÚ TÚ TÚ MARIMACHO!

Yuzuriha intercambió miradas con Marin y Sagiri empezó a mirar hacia todos lados al ver que llamaban la atención del resto de transeúntes.

—¡No soy eso! —Mitsuki se puso colorada—. ¡Es mi estilo!
—Es muy linda enojada —la rubia le sacó una foto a la chica que gritó.
—La imagino funada en TikTok con el título de “enana gritona se desquicia por su brocom” —Yuzuriha se rió.
—Enana linda y gritona con brocom —añadió la que tenía su celular apuntando a la que aún sostenía su dedo en la tomboy.
—Feo —continuó Ume—. Feo, feo, feo.
—¡ME GUSTAN LAS MUJERES, IDIOTA! —finalmente explotó la chica que parecía mas un hombre, saliendo sin querer del closet.
—¡Oh! —Ume retrocedió y bajó su cabeza.

Sagiri se sorprendió un poco, pues ella misma usaba a veces ropa de hombre porque su cuerpo se veía mejor con algo unisex.

—Y ahí va otra —Yuzuriha no parecía sorprendida—- Con esta van nueve amigas lesbianas.
—Matsuri y Harumin son más bien pansexuales —Marin añadió, tampoco sorprendida por las declaraciones de su amiga.
—¿Y tú? —levantó una ceja, para indagar—. Matsuri se ha besado con varias chicas, está enamorada de Harumin.
—Shizuku-tan sexual —declaró orgullosa de su waifu de anime y eroge, después guardó su celular en el bolsillo del short.
—¡Hermanito, me llamó tonta! —alzó se dedo índice para volver a señalar a Mitsuki, mientras con la otra mano abraza a su hermano—. Dile algo.

Gyutaro miró a Mitsuki desganado y le acarició la cabeza a su hermanita. Él ya sabía las preferencias de su compañera de trabajo.

—Te lo mereces, eres tonta —el chico le habló bajo, limpiando con la diestra unas lágrimas que se formaron en los lagrimales de su hermanita.

Los seis se fueron hasta una pequeña tienda frente al Viretta Park, que nombraron así en honor a Kurt Cobain, con una replica exacta de la banca donde el artista se sentaba. Pidieron crepas de matcha, Nutella y frutilla.  El grupo se quedó junto hasta después del atardecer, hablando sobre diversas cosas y el viaje de Marin a Japón.

—Espero que no suban el vídeo a las redes —Ume furiosa empezó a revisar cada App nsyalada en su celular y después escribió en el grupo de chicas de LINE.

Daki: ¡MAS LES VALE NO PUBLICAR NADA O YA NO TE DEJARÉ ABRAZARME, MARIN!

—Estás exagerando.

Gyutaro estaba en la cocina del pequeño departamento, haciendo la cena y preparando los almuerzos de mañana. El joven traía su cabello atado en una pequeña coleta, por alguna razón las hebras de él se habían vuelto bicolor, siendo las raíces negras y el largo hasta las puntas de un lima oscuro.

—Eso no es cierto —continuó mandando stickers enojados—. Aparte que, si la dejo hacer lo que quiera, será peor luego.
—Lo que digas —respondió sin ganas, tener que convivir con tantas mujeres a su alrededor lo dejaba exhausto.
—Yori subió una foto con Chiyo neesan —giró el celular para mostrárselo a su hermano, ella estaba sentada en el sofá de la sala dónde tenían un televisor y una pequeña mesa ratonera.
—Muestra mucha teta —suspiró él como respuesta—. Ni parecen hermanas.
—¿Sí? Me parece más linda que todas las chicas y más agradable —le dio un corazón y escribió un pequeño mensaje dirigido para Chiyo—. Le puse que las copas G deben ser difíciles de encontrar.
—Esa observación está de más —Gyutaro traía un delantal de cocina, debajo enfundaba un jean de Denim y una camisa de leñador. Dejó de revolver el estofado para mirar a su hermana una vez más por la mesada flotante—. También debe ser difícil caminar…
—Y bañarse —agregó ella— o vivir en general.
—No digas eso frente a Chiyo nee-san —continuó cocinando.
—¿Por qué no? —le preguntó, subiendo sus pies al sofá y continuando con la ojeada en Instagram—. Yuzupon y Mei hicieron un live.
—Eso no es cortes —luego pensó que el problema es que su hermanita no es cortes.
—¿Uhm? —inquirió, virando sus orbes azuladas a su hermano—. ¿Y?

Después de unos minutos vio un comercial de línea de cosméticos por televisión, con Marin como cara principal.

—Esa gal me aparece hasta en la sopa —refunfuñó, cambiando de canal y dejando en una película.
—¿Subimos una foto a Instagram? —se levantó de su asiento y corrió hacia su hermano, abrazándolo por la cintura. Parecía una niña así.
—¿Me puedo negar?
—No.

Apretó el botón para poner el temporizador y eligió un filtro neón para colocar, en pocos minutos ya había subido la foto de aquel pequeño y dulce momentos de los hermanos Shabana.

Sorry but you are not allowed to view spoiler contents.


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Reglas, Guías y whatnot / Re: Canje de palabras
« Last post by Cho on January 24, 2024, 08:22:44 PM »
Hola Mimi, tú ganaste tres extras del reto y tienes para canjear tres extras más, te voy a poner esos tres extras como canje.

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Reglas, Guías y whatnot / Re: Canje de palabras
« Last post by Mimi Tachikawa on January 24, 2024, 12:27:38 AM »
Hola choo una consulta entonces son 6 espacios de extras que puedo canjear?? si es asi si quiero y si no lo que tenga que canjear xDD
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HiMEverse / Re: HiMEverse Episode V: The Rebels Strike Back
« Last post by Kana on January 20, 2024, 04:29:25 PM »
Posteo ahora porque después lo olvido

**

¿Era muy exagerado decir que le dolía la cabeza tal cual como si la taladraran? Una punzada penetrante de dolor torturaba todo su cráneo, lo cual provocó que le costara mucho trabajo abrir los ojos como si estos fueran un par de cortinas metálicas muy pesado.

Sí. Seguramente estaba exagerando.
No debía ser para tanto.

—Hmh…— murmuró en una sutil queja, aún demasiado desorientado como para preocuparse donde estaba (o con quién)
—¿Akira?
—…— La voz se le hizo familiar sólo después de unos minutos, era la de Ritsu Shikishima. ¿Estaba en la casa de Ritsu? Trató de reincorporarse, pero la mano del otro en su hombro se lo impidió.
—Espera, no vayas tan rápido.

Y Ritsu tenía razón en esa sugerencia, porque de sólo intentar reincorporarse, todo le dio vueltas a su alrededor y tuvo que volver a recostarse. Carajo.
Entonces, prefirió ir lento y así, después de una pausa en donde se dio su tiempo para adaptarse a la luz, notó que no estaba en su habitación en la casa de Ritsu, ni en ninguna otra parte de la casa de Ritsu.

—¿Dónde estamos? 
—En el Hospital de Rizembool.
—¿Qué? — preguntó incrédulo. —¿Por qué? No recuerdo haberme sentido mal ni nada.
—Después de usar tu poder mental en el desastre ocasionado por Mahiro Nakiri, caminaste un par de pasos y te desmayaste.
—Ya. Eso no pasó. — no creía en las palabras de Ritsu y su rostro serio revelaba que Akira no estaba para bromas.
—Es verdad. — Ritsu le reafirmó con sinceridad. —Traté de llevarte a casa, pero los encargados de Rizembool pensaron que era mejor traerte aquí. Sé que no te gusta que se involucren mucho contigo para que no descubran tus… “pasatiempos” pero, al menos, tu segunda identidad está segura.
—…Bueno, no sé si me quedé tan tranquilo al saber que me desmayé de la nada. Nunca me pasó algo así antes.
—Akira, que poca memoria. ¿No te acuerdas cuando te desmayaste en la escuela en la clase de educación física? — le recordó con cierto tono burlesco.
—Shikishima, eso pasó hace mil años y fue porque me amanecía leyendo libros o jugando LoL –sí, que vergüenza- y porque había comido poco… En fin, ¿cuándo me puedo ir de aquí?
—Quisiera que fuera ahora mismo. — bajó el tono de voz. —No me fio de Rizembool. Pueden poner algo en la medicina o grabar… Quién sabe.
—¿Sigues con la paranoia? Pensé que habías superado ese delirio persecutorio que gira en torno a Ryo Asuka.
—Yo trabajo con esa gente en los laboratorios. Sé lo que digo… Y pensé que estábamos de acuerdo en ese punto.
—Sí. Sí lo estoy. Pero creo que debes bajarle un tanto de decibeles a esa preocupación. Vayamos lento…— suspiró. —Me siento mareado.
—Supongo que ese es el costo de poseer un poder mental tan grande como el tuyo.
—Nakiri hizo que usara toda mi energía en tapar sus desastres. Todavía no sé controlar este poder y usarlo para borrar memorias e implantar recuerdos hizo que me sobrecargara.
—…Sí. Es un caso especial Nakiri.— Notó que Akira se quitaba las vías del suero. —Oye, ten cuidado con eso. ¿Qué haces?
—Me voy de aquí.
—No puedes simplemente irte.
—Sí puedo. Y lo haré por esa ventana.
—Estamos en un quinto piso…
—Eso no es problema.
—Estás con bata de hospital…
—…—
—Pero te traje ropa intuyendo qué harías algo así. — soltando un suspiro, alcanza la mochila donde trae las cosas de Akira. —Cámbiate y será más fácil salir de aquí.
—Gracias, Ritsu. Siempre piensas en todo.

Poco tiempo después y ya con ropa decente puesta, Akira y Ritsu salen del edificio lo cual no fue nada sencillo con toda la vigilancia y con lo convaleciente que aún estaba Akira pero finalmente se logró.
Ritsu pidió un Uber y tras un largo trayecto llegaron a su casa. Akira prefirió ir directo a ducharse y luego de asearse se fue a su cama donde se recostó estando exhausto. A lo lejos escuchaba tenuemente como Ritsu preparaba comida, pero no estaba con energía para ayudarlo en nada.
Para su suerte, su amigo subió una sopa hasta su cuarto.

—¿Cuánto tiempo estuve dormido? — preguntó con un poco de angustia acumulada de golpe en su pecho cuando notó que la planta en su cuarto estaba algo marchita.
—Algo así como dos días.
—Q-Qué
—Sin duda todo el trabajo mental te dejó muy agotado.
—Eh. — le preocupaba que Ritsu dijera esas cosas con una sonrisa de satisfacción.
—Pero lo bueno de esto es que tuve tiempo de averiguar información dentro del hospital de Rizembool.
—…
—Especialmente en el área Psiquiátrica. Fue difícil entrar en el área de registros de pacientes que fueron Rebels pero pude entrar.
—…Demonios, Ritsu. ¿Tú no paras?
—Deberías estar agradecido de que hice esto. — saca su teléfono celular, se sienta en la cama y le muestra la pantalla a Akira revelando unas fotografías que tomó. Eran expedientes de hace unos años atrás. —Hubo un Rebel que tuvo un poder parecido al tuyo, era capaz de manipular la mente de otros e instaurar recuerdos falsos, incluso lograba crear ilusiones que lograba confundir a sus rivales arrojándolos en una eterna lucha entre lo real y lo alucinante induciéndolos a estados de psicosis ante el desgaste mental.
—Eso suena mucho más allá de lo que yo puedo hacer.
—Probablemente él tenía un nivel de dominio mental más desarrollado, pero… Según lo que dice el expediente. — fue pasando a la siguiente imagen. —“H.K, Rebel de rango S, fue excepcionalmente brillante y poderoso, uno de los Rebels más espectaculares que cumplió bien en sus desempeños contra sus tres primeras HiMEs a quien logró vencer con facilidad. Pero fuimos descuidados en no estudiar previamente su estado mental el cual se encontraba desde su adolescencia temprana perturbado por traumas que desarrolló en él un desequilibrio mental y una personalidad asocial. El poder psíquico del cual era dueño lo consumió trastornándolo, volviéndolo delirante y maniaco, y resultó ser incontrolable para nosotros trayendo muchas desgracias incluso para Rizembool.”
—¿Qué pasó con “H.K”?
—…—
—Ritsu.
“Se decidió ingresarlo en fecha XX XX XXXX en la unidad de Psiquiatría del Hospital de Rizembool para tratar su patología mental. Se sospecha que nunca adhirió a tratamiento farmacológico y que engañó a sus doctores con un falso estado de salubridad. Fue dado de alta, pero su desempeño como Rebel volvió a ser caótico y extremadamente peligroso para TODOS sospechándose de dar libertad a una pesonalidad más psicopática”— sigue a la próxima fotografía. —"El comité de ética de Rebels en audiencia excepcional resuelve dar de baja el rol como Rebel a H.K y su expulsión de Rizembool. Como todo procedimiento con Rebels egresados o dados de alta, se lleva a H.K a los laboratorios para quitarle su poder y volver a darle estado de humano normal. Aunque pareciera que el joven H.K volvió a ser una persona normal, se reciben reportes de que incluso dado de baja y confiscado sus poderes él aún los mantiene intacto. Se deriva su ficha clínica y su expediente de Rebel a la unidad especializada de encargados de Rebels divergentes."
—Rizembool tiene unidades especializadas para todo… Si ese sujeto era “divergente” quiere decir que hoy en día todavía puede usar sus poderes. — Akira meditó unos momentos, pensativo. —Me tienta pedirle a Minato que investigue su identidad. Tal vez pueda encontrarme con él y preguntar cómo llevar estos poderes sin… perder la cordura.
—No creo que llegues a ese estado. Al parecer, H.K tenía problemas y traumas de infancia que lo llevaron a tener fragilidad física. Además, no creo que H.K precisamente se volviera psicótico. Creo que más bien él era el enloquecía a los demás con su poder. Era un psicópata. — deslizó una imagen más. —Y no creo que ni el mismo Minato logre encontrarlo. En su último reporte…— dudó un poco en revelar la información a Akira, ya parecía demasiado incómodo pensando que su poder podía causarle un deterioro mental. Pero la insistencia en la mirada de Akira lo llevó a continuar con la lectura. —“Suicidio”
—…— Akira se quedó en silencio.
—Hey, esto no te va a pasar a ti. — trata de alentar a su amigo. —Tus poderes no te llevaran al límite como a H.K. Nosotros corremos con ventaja de que tenemos información más actualizada y somos precavidos.
—No pienso que H.K se haya suicidado. Tomando en cuenta tu deducción sobre un tipo de personalidad psicopática, ¿para que se iba a suicidar sin lograr un gran objetivo con su muerte que lo hiciera famoso? No tiene lógica.
—O tal vez Rizembool lo silenció.
—Eso suena más lógico. Con mayor razón tengo que encontrarlo. Tiene sus poderes a pesar de que Rizembool se los desactivó. Él es la clave.

Ritsu observaba en silencio a Akira ante estas últimas palabras. Estaba seguro que Akira, Minato y él estaban en plan de develar las investigaciones de Rizembool y ponerle un alto a los experimentos humanos que llevaban en la institución lo cual ya se estaba escapando de las manos de todos y podría volverse en un conflicto de no sólo dos escuelas sino del mundo entero.
Pero, aunque no quería tener pensamientos así, algo le llevaba a pensar que quizá Akira quería conocer a H.K para ser un caso divergente como él y continuar con los beneficios de los poderes aun cuando todo acabe.

Aunque, ¿para qué Akira desearía conservar los poderes de Rebel?

“No es como si Akira fuera Isildur y yo Elrond frente a la grieta del destino”

—Termina la sopa y descansa. Ten por seguro que los agentes de Rizembool vendrán a ver que todo esté bien contigo. Ya les notifiqué que te fuiste del Hospital para que no tengan represalias contigo. Me dijeron que desean verte mañana.
—¿Tan pronto? deberían darme tiempo para mí.
—Tú decidiste ser Rebel y tú decidiste demostrar ser un muy útil y excepcional Rebel. Acostúmbrate a que Rizembool succione todos tus días.
—Que alentador, Ritsu. — giró los ojos, hastiado. Esperó a que Ritsu saliera del cuarto para alcanzar su teléfono y mandar un mensaje a Minato.

“¿Puedes buscar Rebels con iniciales H.K”?









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Reglas, Guías y whatnot / Re: Canje de palabras
« Last post by Cho on January 19, 2024, 04:27:00 PM »
Hola, Eureka~ listo, ya están tus espacios, que los disfrutes~
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Reglas, Guías y whatnot / Re: Canje de palabras
« Last post by Eureka on January 19, 2024, 03:57:36 PM »
Hola, Cho~ Quiero canjear 2 oficiales, 5 extras y una HiME. Muchas gracias!
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