ESTE FIC ES UNA CLARA MUESTRA DE POR QUÉ YO NO PUEDO PARTICIPAR EN LA ACTIVIDAD </3 Casi 5k jejejejejeje
Puntos a tomar en consideración: Fic basado en un 100% en mi historia de gitanos con Aleh, así que tiene muchos elementos del gitano lore (
?) es un AU dentro del AU (!?!??!!) ya que no pasa nada de los eventos importantes de Henschel lalalala y not-so-much-of-an-AU puesto que al inicio siento cosas del personaje de Sui que jamás me alcanzó el tiempo de escribir en el fic Neteriano. TAL VEZ ESCRIBA MÁS GITANOS Y POR ESO LO HAGO SO LEAVE ME ALONE.
Also, interpretación libre de la prompt
no hay apuesta jejejeje
Pocky day. Tu bishoujo pierde una apuesta y debe jugar al pocky con tu bastard.Ese día, la abuela se despertó antes del amanecer por culpa de las pesadillas. Esta vez había vuelto a soñar con el día en que Anita se había ido del campamento, llevándose a la menor de las bebés, la más frágil, la más enfermiza. Le había prometido una y otra vez que volvería, que no se preocupara, que tan solo sería un par de meses hasta que con su esposo encontraran a un doctor en otro país, Vessalius era muy inseguro, mejor no pasar por ahí…
En el sueño, la abuela se llevaba a la mayor de las niñas de vuelta a su carromato, la depositaba en la pequeña cuna que habían improvisado cuando nacieron y se sentaba a su lado, sonriéndole. Después, tras un leve parpadeo, la bebé desaparecía y entraba una joven por detrás del carromato, con una mirada inquisidora y el ceño fruncido. Era ahí donde siempre se despertaba.
Con cuidado, la abuela se irguió en la cama y pudo observar mejor a Suiseiseki, durmiendo a su costado, desnuda y con las piernas bien abiertas, sin pudor alguno. La muy estúpida nunca supo dormir con la boca cerrada, así que toda la almohada y parte de su cabello se encontraban mojados. Todo un desastre, igual que…
“SUISEISEEEEERGHDFGHKJFHJ”, la cortina se abrió de un tirón y la ojicolor gritó mientras se levantaba de un brinco. La abuela suspiró, ese era el precio que tenía que pagar por tener a Mizuki como ayudante de recolectora: Sus gritos inesperados antes del alba.
“¿¿¿¿¿QUÉ CHUCHA TIENES EN LA CABEZA?
?”, gritó mientras se tapaba rápidamente con la sábana al ver que detrás de la mayor estaba Kame, tapándose el rostro sonrojado.
“FELIZ DÍAH DEL POCKY, MEJAH u_ú9”
“¿¿Y NO PUDISTE ESPERARTE DDDD:?? ¿¿QUÉ TAL SI LE DABAS EL PARO CARDIACO A LA ABUELA, AH, AAAAH??”
“No, nadah que ver, si yoh me fijé que estuvierah despierta por la ventanah
”
“
Jamás recibiré la herencia csm >( ¡¡BUENO PUES IGUAL, MIRA QUÉ HORA ES!! ¿¿Y QUÉ HACE KAME AQUÍ??”
“KAME VIVE CONMIGOH, DUH”
“Discúlpala, desde hace meses que está que espera este día…”
“¿Y YO QUÉ TENGO QUE VER?”
“Ohohohoh~”, Mizuki sonrió a la par que sus ojos se volvían fríos y calculadores. Suiseiseki reconocía muy bien esa mirada, era la misma mirada que usaba Suki cada vez que buscaba embaucar a una pobre alma vendiéndole iPhones bloqueados y jurándoles por la Rosa de Guadalupe que venían nuevos de fábrica. “Es algoh muy simple. Tendremos una bonitah celebración en comunidad donde jugaremos al tradicional juego de—”
A Mizuki se le escapó una mirada de reojo hacia Kame. Suiseiseki sumó dos y dos y comprendió lo que la desgraciada de su mejor amiga quería hacer y venía queriendo hacer desde que había entrado a la adolescencia y la abuela había dicho que era hora de buscarle esposo. Agarró un zapato que tenía a la mano y atacó. Gritó también por su caballero de galante armadura.
“¡¡LIEEEEEEEEEEEEEEET!!”
Ya con el sol alumbrando, después de la reprimenda del Piñi por haberles privado a todos del sueño y haber cumplido el castigo de acarrear el agua del día para toda la comunidad, Suiseiseki y Kame se tiraron bajo la sombra de un árbol intentando recuperar la respiración. Mizuki habría estado con ellos cumpliendo el castigo de no ser porque Liet tuvo que tratarla de emergencia cuando Suiseiseki le abrió una herida con el taco de su stiletto.
“¿Sabes? Nunca creí que alguien sería capaz de hacerle eso a Mizuki. Es decir, es más alta que todos nosotros, hasta a Ueda le da miedo”.
“Nunca subestimes el sentimiento de poder que te da tu NOTP (?)”. Kame rió.
“¿No crees que deberías ir a disculparte?”.
“Supongo”.
Suiseiseki rodó los ojos y por un buen rato ambos se quedaron en silencio, observando a la caravana despertarse y empezar el día. Después de un par de minutos vieron venir a Jin con su pseudo afro habitual y los dos chasquearon la lengua de fastidio al mismo tiempo. Al darse cuenta, se echaron a reír.
“¿Qué es tan gracioso?”, preguntó el mayor cuando llegó a donde estaban. “No, esperen, no contesten, mejor no arruinar el momento”, se volteó hacia la ojicolor y sonrió ampliamente, apoyando las palmas en las caderas. “Acabo de ver lo que le hiciste a Mizuki y debo decir que nunca me había sentido más orgulloso de ti en mi vida. ¿La siguiente puede ser Suki?”.
“Ya te le adelantaste tú en la lista de espera (:”, Suiseiseki le sonrió con molestia. Jin se limitó a reír y se sentó a su otro costado, dejándola al medio.
“En fin. Mizuki me mandó decirles que con o sin herida de cuatro puntos igual desea que todos nos juntemos en la tarde a celebrar el día del Pocky”.
“¿ES QUE NO APRENDE?”, gritó la ojicolor jalando el pañuelo que solía utilizar en el cabello y tapándose los ojos. “¿¿SI CLAVÁNDOLE UN STILETTO NO LE ENSEÑA, QUÉ LO HARÁ, SANTO KIRA??”, elevó sus plegarias al cielo, pero Kira no le respondió, ocupado como estaba infartando gente en otros universos alternos.
“Ya la conocen, si se le mete una idea en la cabeza no va a dejarla nunca”, Kame arrancaba pasto para pasar el tiempo. “Sea lo que sea que tenga en mente, sucederá, de eso no tengan duda”.
“OH POR FAVOR”, dijo Jin mirándolo de manera acusatoria. “COMO SI TÚ NO SUPIESES MUY BIEN LO QUE MIZUKI TIENE EN LA MENTE”.
“No sé de qué estás hablando =D”, el chico le mostró una preciosa sonrisa con ganas de matarlo, pero lamentablemente el Akanishi era el más desgraciado del grupo y no tenía miedo a decir lo que pensaba en ningún tipo de situación.
“BIEN BABOSO TE HACES, ¿NO? BIEN QUE QUIERES CHAPÁRTELA AQUÍ A MI AMIGUITJIKGHFGFKGFG”, antes que pudiera terminar la oración, Suki había aparecido de la nada y rápidamente le había hecho una llave alrededor de su cuello (??).
“AY CARIÑITO, CUÁNTO TE EXTRAÑÉ”, la rubia aprovechó de tirarle una patada en el estómago y el pobre de Jin se quedó sin aire, lo que Suki aprovechó para comenzar a jalarlo del brazo en dirección a la caravana. “Disculpen amiguitos, mi amorcito no ha tomado su Ritalin en la mañana (: ya más tarde lo traigo…”, y dicho y hecho, se fue sin más. Sin embargo, si Kame en un momento se había sentido aliviado porque Suki impidió que Jin develase meses y meses de arduo trabajo, se encontró con una ceja bien alzada en el rostro de Suiseiseki y una cara de pocos amigos.
“Así que tú también”.
“¿…Yo qué?”.
“Nada. Solo eso”. Suiseiseki se levantó y se cruzó de brazos, mirándolo desde arriba todavía con ese aire de desconfianza. “Ahora, si me disculpas…” y se fue del lugar. Kame se tapó la boca con las manos y gritó.
El momento en que Toris escuchó la voz de su mejor amiga, como cada vez que la escuchaba tan dulce y melodiosa, evaluó el suicidio. Y no es que no quisiera a la ojicolor, de hecho ambos siempre se habían tratado como hermanos toda la vida, pero esa voz solo significaba problemas. El problema, sin embargo, era que conociéndola, ya se le habían adelantado.
“OH LIETSI BONITOOO, MI NIÑO PRECIOSOOO~~~”
“No”.
“NI SIQUIERA ME HAS ESCUCH—”
“No”.
“PERO POR QUÉ—”
“Mira”, Liet se volteó y suspiró por enésima vez en el día. “¿Recuerdas esa bonita colección de soldados de cobre que tenía y que trabajé muy duro para comprar?”.
“¿Sí? ¿Pero qué tiene que ver?”.
“Mizuki la robó en la mañana después que le cosiera la herida, Suki la tiene y ha puesto una subasta en Amazon que acaba en dos días. Así que por más que te quiera y te estime, lo lamento, pero este terminará siendo el año en que finalmente beses a Kame”.
“…”
“Si te sirve de consuelo, te horneé galletas”. El mayor descubrió una bandeja que reposaba bajo un mantel y puso las galletas en un plato. Suiseiseki las tomó de manera brusca, comió una rápidamente y luego elevó la mirada al techo. Si algo era peor que la voz melodiosa de Suiseiseki, era la ausencia de esta después de haberla escuchado.
“Si guerra es lo que quieren, guerra tendrán”, murmuró para sí misma.
“Espera, Sui, no irás a hacer algo… Bueno, lo que sea que estés pensando”.
“Todos en la caravana saben que tú eres mi debilidad, Liet. Es hora de buscar nuevos aliados”.
“No es por ofender, pero todos quieren que te cases con Kame, nadie está en contra de ustedes además de ti”. Suiseiseki sonrió.
“¡Exactamente! Si nadie está en contra, entonces iré con mi mejor aliado: Al que sinceramente, no le interesa”.
“¿Y yo qué gano?”, preguntó después de escuchar su plan y mirándose las uñas, con poco interés.
“MI AMOR INCONDICIONAL”
“Tu amor no me sirve”
“ENTONCES MI CUERPO”
“¿Para qué te quiero si eres plana?”
“MIRA PAPITO, TÚ NO ERES EXACTAMENTE—”, antes que la ojicolor pudiera siquiera terminar la frase, el chico se limitó a subir su camisa hasta el pecho y dejar que viera sus marcados abdominales por un par de seguros. Bajó la camisa y le dio una sonrisa socarrona.
“¿Decías?”
“Ok”, respondió sonrojada y tapándose el rostro, todos bien sabían en la caravana que la abuela nunca le daría la charla de
“Cuando mamá y papá se quieren mucho…”, así que era demasiado fácil avergonzarla. “ENTONCES NO SÉ, SI QUIERES VENDE MIS ÓRGANOS”
“¿Gitano vende órganos? No planeo terminar en la cárcel”.
“OK CUÁL ES TU PRECIO”. El mayor sonrió.
“Muy fácil (: Serás mi esclava por una semana y harás todos mis deberes, ese es mi precio único para que sigas viviendo pura e inmaculada de Kame”.
“FINE >( PERO NO ME RESPONSABILIZO DE TUS DOLENCIAS CUANDO TE HAGA VOODOO”
“Como digas”.
Ueda le sonrió y le dio la mano, la cual Suiseiseki estrechó dando saltitos de emoción. No todos los días encontrabas a Ueda de humor cooperativo, así que justo hoy, en tan terrible día para su destino y con Liet en su contra, finalmente su suerte comenzaba a cambiar. Su plan “#DileNoAlKapuri2k16” pronto vería la luz.
Finalmente llegó la tarde y todos se encontraban reunidos en el carromato de Suki, quien se había esmerado de más y había decorado con ahínco el lugar (o sea, pasó escoba nomás) para la hermosa (horrible) y tradicional (por primera vez) celebración del día del Pocky. Para la ocasión, tanto Suki como Mizuki (y Kame. Y Jin. Giriko y Akari habían hecho una transferencia bancaria. Hasta la abuela. Incluso Liet. Que Suiseiseki no se entere, por favor) habían gastado un mes antes parte de sus ahorros en varias cajas del dulce, para asegurarse que nadie (es decir, Suiseiseki) se quedara sin besar a nadie (es decir, Kame).
“BUENOH MEJOS, MEJAH Y ASESINAH, nos encontramos aquí reunidos en santoh sacramentoh para casar a nuestros queridos hermanos—”
“MIRA, MEJOR DE UNA VEZ BESÉMONOS, OKAY?”
“Claroh, intentas asesinarme en la mañanah, luego quieres besarmeh en la tardeh…”
“OK, ESCUCHEN”, esta vez Suki los interrumpió a todos porque ya estaba harta de no ver acción y se puso en el medio del círculo que habían hecho todos al sentarse. “Es algo muy, muy simple. Vamos a jugar al bonito juego de la botella y—”
“YO NO QUIERO VOLVER A BESAR A JIN”
“BIEN QUE TE GUSTÓ QUE ME METISTE LENGUA”
“¿¿CÓMO TE ATREVES??”
“MEJOH, QUE AHORAH TODO ESTÁ ARREGLADOH PARA QUE LA BESES A LA OTRA”
“LIET, LLAMA A MI ABOGADO”
“UEDA BESA MEJOR QUE TÚ”
“SUI, TÚ NO TIENES ABOGADO”
“¿¿CÓMO TE ATREVES??”
“¿Qué puedo decir
?”
“CÁLLENSE LA CONCHA DE SUS SANTAS MADRES”
“HEY”, gritaron Kame y Mizuki al mismo tiempo con enojo.
“No offense”, Suki rodó los ojos. “Bueno como iba diciendo antes que todos descubriéramos que Ueda es el que mejor besa—”
“UELEH OTEPÉ”
“CALLAH ESCUINCLAH BABOSA”
“Pero si Ueda se vuelve mi padre… ¿¿ENTONCES BESÉ A MI PADRE??”
“Esto es peor que Tyga siendo sobrino de su propio hijo por culpa de las Kardashians”
“Técnicamente Kylie es una Jenner—”
“CÁLLENSE HIJOS DE PUT—”
“HEY”, volvieron a reclamar los otros dos.
“NO OFFENSE”, Suki quería arrancarse los pelos, pero recordó que eran parte de su sex appeal y que le había costado mucho el laceado brasileño, así que mejor no. “En fin, vamos a usar esta bonita y preciosa botellita”, Suki la puso en el piso, era una linda botella pintada de rosado con morado y varios stickers de estrellas, “Para determinar a quiénes les toca comer el Pocky de parejas primero. Uno de quienes participó vuelve a girar la botella y así seguimos hasta que se acaben los Pockys (: reclamos? No? Ok, que empiece el Kapuri, I MEAN, el juego”. Volvió a su sitio, se sentó y le dio la vuelta a la botella que sorprendentemente… “¡Oh! ¡¡Suiseiseki y Kame, qué coincidencia =)!!”
“Ay qué bonih =)”
“Oh, vaya, quién lo diría…”
“LIET, LLAMA A MI NOTARIO”
“SUI, TÚ NO TIENES NOTARIO”
“ACTUALLY—”, antes que la ojicolor pudiera decir algo más, Ueda tomó la botella y le dio otro giro, para que esta terminara nuevamente señalando a Suiseiseki y a Kame. En silencio, ante el nerviosismo del comité #Kapuri2k16, volvió a darle vuelta dos veces más y el mismo resultado ocurrió.
“…”
“Vaya”.
“OIGAN, YO TAMBIEN QUIERO BESAR”, dijo Jin que aún creía que el mundo giraba en torno a él.
“Bueeeeeeno”, Suiseiseki se levantó con una sonrisa victoriosa, salió del círculo y fue a la mesa de Suki donde había otra botella vacía. “Me parece que tendremos que usar otra, ¿no?”, les sonrió a los presentes y se reintegró al grupo, solo que esta vez cambió de sitio para consternación de todos: Se había sentado justo al lado de Kame, eliminando cualquier posibilidad de que las botellas los señalaran a ambos. Para dejar bien en claras sus intenciones de arruinarles el juego, se abrazó del brazo izquierdo del chico con fuerza y le sonrió. “¡¡A jugar amiguitos =)!!”. Y dio giro a la botella.
Y la botella terminó señalando a Jin y a Kame.
“OH VAYA, CÓMO ES EL DESTINO”, le dijo Suiseiseki al mayor y le dio palmaditas en la espalda, mientras este palidecía y su mirada se encontraba perdida.
“AKANISHI NI SE TEH OCURRAH PROPASARTE CON MI NIÑOH”, le advirtió Mizuki a la par que sacaba una navaja (¡!) de sus pantalones.
“Mizuki, Mizuki, Mizuki…”, Jin rió y sacó un Pocky de las cajas, levantándose y arrodillándose frente a Kame. “Si Kame desea más de mí, ¿qué otra cosa más puede hacer este humilde servidor?”
“Jin, espera, no—”, pero el mayor ya le había tomado de la mandíbula, y con el Pocky en sus labios, se lo encajó rápidamente en los suyos y acabo el dulce en cuestión de dos mordidas, besándolo rápidamente. Tanto Mizuki como Kame palidecieron aún más, Suki se debatía entre sentir celos o querer unírseles (¿?) y Suiseiseki escribía ideas de fics para el Kink Meme (¿?). Kame terminó empujándolo para que lo soltara.
“ÓYEME DESGRACIADOH—”, sin embargo, antes que Mizuki pudiera clavarle la navaja a Jin, Ueda ya la había tacleado contra el piso.
“MIZUKI, CONTRÓLATE”, le reclamó Suki, parándose de su sitio. “Sui, ayúdame a que no mate al pobre Ueda”.
La ojicolor asintió y se levantó para ayudarlos, pero en ese instante Mizuki se sentó como una señorita aferrándose al otro lado de Kame, donde se había sentado originalmente. Suiseiseki se dio cuenta de la maldita trampa, ya que al voltear, Suki ya había tomado su asiento y se abrazaba del otro brazo de Kame, haciéndose la loca y mirando sus notificaciones en su iPhone. El pobre chico estaba demasiado avergonzado como para mirarla siquiera a los ojos.
“BUENO, ¿SEGUIMOS O NO?”, reclamó Jin.
“Sí, claro (:”, Suiseiseki le dio una patada en su pierna izquierda y aprovechó que este la recogía del dolor para sentarse en medio de él y Suki. La rubia la miró con ganas de matarla.
“¿Qué esperas Jincito? Gira la botella”, le apremió Sui.
“Pinche asesina neurótica”, murmuró y la puso a girar.
Ahora la botella apuntó a Liet y a Mizuki.
Liet le dio una pequeña sonrisa a Mizuki y esta le sonrió con confianza, tomó un Pocky de la caja que había abierto Jin y se arrodilló frente a él. Para su suerte, el Pocky se rompió antes que llegaran siquiera a tocarse los labios y la mayor saltó emocionada por haber conservado su integridad y—
Suiseiseki ya se encontraba aplaudiéndole desde el sitio que había dejado al lado de Kame.
“I see (:”, dijo con esa lengua que había aprendido al recuperar sus memorias de su vida pasada y, sentándose al otro lado de Suki, dio el giro a la botella mirándola de manera fulminante y dejándole de mensaje mental cómo se iba a vengar por resistirse ante su guapo hijo y cómo su boda iba a ser tan grande y bella que—
“Mizuki, te toca de nuevo”.
“¿Eh?”, miró hacia dónde apuntaba la botella y…
“OMG OTEPÉ”
“QUE TE CALLES ESCUINCLAH BABOSA”
Mizuki miró con horror a Ueda. No es que tuviera algo en contra del chico, pero desde el momento en que como madre responsable había apoyado la unión de Kame con la ojicolor, ésta en represalia no había dejado de fastidiarla con Ueda a falta de poder fastidiarla con alguien más (además, todos sabemos que el Jisuke es canon). Por su parte, a Ueda no le interesaba en lo más mínimo las cosas que hacían las tres mujeres jóvenes de la caravana (además que las tres eran bien planas como para prestar atención), pero debía admitir que le causaba cierta gracia los intentos de Suki y Suiseiseki por emparejarlo con Mizuki.
El chico volteó a ver a Suiseiseki, su futura esclava, y esta asintió enérgicamente con la cabeza y con una gran sonrisa. Después de haber corroborado entonces que todo iba acorde al plan, Ueda le dirigió una sonrisa a Mizuki, sacó un Pocky de la caja sin romper contacto visual y se acercó lentamente a ella…
“LO QUEH SEAH QUE ELLA TE HAYA PAGADOH YO TE LOH DEVOLVERÉ EL DOBLEH”, comenzó a suplicarle mientras retrocedía, pero Ueda solo avanzaba sonriéndole de lado. Por detrás se escuchaban los gritos de Jin
‘ES TODA TUYA, GANADOR’ y Suki, su gran compañera, su gran confidente, aquella que siempre la había acompañado en las buenas y en las malas, la que nunca le había dado la espalda, con la que siempre podía contar para joder a Suiseiseki, aquella alma comprensiva y caritativa…
“SUKERGH, AYÚDAME”
“¯\_(ツ)_/¯”
“…”
Y Ueda la tomó de la mandíbula, le metió el Pocky en los labios… Pero no, Mizuki podría aceptar muchas cosas en la vida, incluso podía aceptar tener que eventualmente besar a Ueda si quería ve a Suiseiseki besar a Kame. Sin embargo, ser uke jamás sería una de esas.
“>(“
En medio de los rostros horrorizados de Jin y Ueda, Mizuki tomó a este último de ambos lados del rostro con sus manos y comió el Pocky en un dos por tres, cuidando de romperlo antes de llegar a su boca, pero dejándole bien en claro quién mandaba ahí. Todos se quedaron en silencio y Mizuki aprovechó el caos mental para levantarse, arrancar a Suiseiseki del brazo de Kame y sentarse ahí al lado del chico. Tomó bruscamente la botella y le dio vuelta…
Sus ojos se iluminaron al ver que finalmente volvía a señalar a Suiseiseki…
…Pero tan solo por unos centímetros no le dio a Kame y le dio a Suki.
“OH QUÉ PENA, SUKERGH NO ES LESBIANAH”
“Actually—”
“QUE NO ERES LESBIANA, HE DICHO, SUISEISERGH VA A BESAR A KAMEH”
“AH NO, NO, NO”, gritó enfadado Jin, “Le tocó besar a Suki, SE BESA A SUKI”
“¿¿Y POR QUÉ MEJOR NO BESO A JIN QUE ESTÁ AL OTRO LADO??”
“…”
“Ah verdad, nadie quiere besar a Jin, disculpen el lapsus”.
“¿DISCULPA?”
“QUE VA A BESAR A KAMEH”
“LIET, LLAMA AL REY SALOMÓN”
“SUI, EL REY SALOMÓN MURIÓ”
“Pero esperen, lo más equivalente que tenemos al Rey Salomón aquí es Liet, ¿no creen? Mejor que él decida si Suiseiseki besa a Suki o a Kame”, comentó Ueda. Todos miraron a Liet que empezó a sudar en silencio, mientras Mizuki sacaba la laptop y le mostraba la subasta de sus soldaditos y Suiseiseki simplemente se tronaba los dedos con una mirada amenazadora.
“M-Mejor que decida otra persona—”
“NO, TÚ/H ERES EL INDICADO/H”
“Awwww Zukekergh, siempre diciendo todo al mismo tiempo YOY”
“Awwwwn <333 ya ahora cállate y besa a Kame >(”
“Mizuki”, Suki se echó al piso por detrás de Kame y jaló del brazo a la otra para que hiciera lo mismo, le susurró algo en el oído y la mayor se levantó con una sonrisa.
“Que Sui bese a Suki =)”
“Finalmente”, dijo Jin agradeciendo.
“¿QUÉ SE TRAMAN, DESGRACIADAS?”
“Me ofendes, Sui”, comenzó Suki finjiendo tristeza. “Después de tantos años juntas, una creería que confiarías más en mí… DESPUÉS DE TODO LO QUE HEMOS HECHO, DESPUÉS DE TODA LA HIERBA FUMADA, DE TODOS LOS CELULARES ROBADOS”
“YA, YA, YA”, gritó la otra que sabía cómo se ponía la Suki Daisuki de dramática cuando quería. “PUES VEN Y BÉSAME ENTONCES”.
Suki sonrió y dio unas palmaditas, tomó un Pocky y se dirigió a su mejor amiga. Bajo la atenta mirada de Jin y Ueda (y Kame. Y Liet. Que Suiseiseki no se entere, por favor) se puso el Pocky en la boca y Suiseiseki recibió el otro extremo. Ambas comenzaron a comerlo lentamente…
Y en eso, Suki acabó rápidamente el dulce y se lanzó en un gran beso a la ojicolor, que de la impresión perdió el equilibrio y se fue hacia atrás, llevándose a Suki consigo, quien aprovechó de poner ambas manos al lado del rostro de la chica para no perder el equilibrio…
“Wow”, murmuraron tanto Ueda como Kame al mismo tiempo después que Suki se separara finalmente de la chica, sin dejar de mirar la escena con tristeza porque esta hubiese acabado.
“Disculpen, tengo que ir al baño”, dijo Jin tras sacarse su fedora y ubicarla estratégicamente cerca de sus caderas al levantarse.
“Sui… ¿Estás bien?”, preguntó Liet acercándose a la chica que seguía mirando atónita a Suki, la que simplemente le daba la espalda y se dedicaba a tomarse un selfie con ella de fondo.
“Suiseisergh I’m so sorry”, dijo Mizuki dándole unas pequeñas palmadas en el brazo. La ojicolor simplemente se levantó con ayuda de Liet, miró a Mizuki por un par de segundos y luego se quedó en silencio.
“Uh, creo que mejor no seguimos…”
“No, no, nada de eso, siéntate Liet”, apremió Suki y puso de nuevo a girar la botella, tocándole el turno de nuevo a ella aunque esta vez su víctima era Liet. “¡Mira qué lindo, los dos hermanitos =)!”
“Suiseiseki…”, le susurró su mejor amigo cuasi hermano tomándole de la mano, claramente pidiéndole consejo tras lo que le había tocado vivir. La ojicolor le miró dulcemente, tomó su mano con ambas y negó con la cabeza.
“Sé fuerte, Liet. Sé fuerte por tu madre”
“…”
Suki tomó un Pocky y se lo puso entre los labios, pero esta vez, conociendo lo muy reservado y avergonzado que podía ser Liet, se dirigió hacia él gateando lentamente. El chico se sonrojó al instante y comenzó a balbucear que lo dejara en paz, mientras Suiseiseki tenía la mirada perdida, pero en el último tramo Suki se lanzó hacia su presa y de vuelta terminó también encima del chico. Desde esa perspectiva nadie podía ver siquiera si el Pocky había llegado a su destino, sólo podían ver a la rubia tomando al chico de ambas mejillas y estampándole un beso que ni siquiera Jin se atrevería de darle a Kame. Y largo. Demasiado largo. Tan largo que fue Ueda el que se preocupó.
“Oye Suki, ¿todavía está respirando?”, solo ahí fue que la menor del grupo se separó de Liet y el pobre, que nunca se había sonrojado tanto en su vida, se tapó el rostro como si quisiera evitar que la loca esa decidiera seguir besándolo.
“Bawwww, y eso que estoy sobria”, dijo Suki riéndose y levantándose. “Ueda, mejor lleva a que el pobre Liet tome algo de aire”.
“Bueno”, respondió y ayudó al chico a pararse antes de llevárselo.
“QUE NO LO VEA LA ABUELA, VAYA A CREER QUE OTRO ESCORPIÓN LE PICÓ”, gritó Suiseiseki mientras los demás se iban… Para voltearse y ver a Kame, todavía sonrojado, sentado exactamente delante de ella. “Esperen un—MALDITAS DESGRACIADAS”, sus dos amigas estaban sentadas a su lado, de manera en que por más vueltas que diera la botella, jamás le tocaría tener que besarlas, sino al chico que tenía en frente. “AH NO, NO, YO ME V—” y apenas intentó levantarse del lugar, su falda simplemente no cedió. Se volteó y vio cómo la navaja de Mizuki y algunos cuchillos que reconocía de la cocina de Suki, se encontraban clavando fuertemente su falda. Ahora comprendía por qué Suki se le había ido encima y Mizuki no había puesto pelea. Ahora entendía por qué se habían deshecho de Liet y de Ueda. “Kame”, esta era su única opción, “Kame, tú no quieres que sea así. Tú no quieres que nuestro primer beso sea así”, ahora el chico prestaba atención, “Nuestro primer beso debe ser completamente maravilloso, algo que recordemos con amor y pasión el resto de nuestros días”
“TE ESTÁ MANIPULANDOH LA MUY DESGRACIADAH”
“SÍ, NO LE HAGAS CASO”, Suki puso la botella en el medio y comenzó a girarla.
“KAME SI ME AMAS NO ME HAGAS ESTO, MERECEMOS ALGO MEJOR, MERECEMOS UN BESO QUE LE DARÁ ENVIDIA A NUESTROS NIETOS, KAME NO—”
“NOH VA A CUMPLIR NADAH DE LO QUE DICEH”
“MIRA, YA ES TU TURNO”, la rubia ni siquiera dejó que la botella terminara de girar y apuntó de frente a ambos.
“DE UNAH VEZ, YA”, Mizuki le lanzó un Pocky.
“KAME”, imploró la otra con lágrimas falsas que cualquier idiota (menos Kame) se daría cuenta de ello. “KAME POR FAVOR, TE LO PIDO”
“Suiseiseki… Tienes razón…”
“NO, KAME NOOOOO”
“SÍ, KAME SÍIIIII”
“Yo…”
“Oh”, la puerta se había abierto con Jin de vuelta, pero el chico vio cómo la botella apuntaba hacia él, ya que cuando Suki forzó que apuntara a los otros dos, la botella se había movido y apuntaba a Jin. Con Suiseiseki al final. “Pero por supuesto que sí”, sonrió.
“JIN ESPERA, NO”
“SÍ JIN, DÉJALAH EN PAZ”
“PENDEJO A ELLA NO”
“ÓYEME AKANISHI—”
Pero todas las voces no fueron escuchadas y Jin se acercó a la chica que no se podía mover y, sin siquiera tomar un Pocky, la beso de manera directa y con lengua. Suki gritó horrorizada, Mizuki ahora sí sacó su navaja de la falda de la chica para usarla y Kame se le lanzó encima al chico y lo jaló por la espalda botándolo hacia atrás con gran fuerza, al momento en que Liet entraba y caía estrepitosamente hacia atrás llevándose también a Ueda, quedando los tres tirados fuera del carromato. Antes que preocuparse por ellos, Kame se arrodilló a tomar la mano de la ojicolor, mientras Mizuki lloraba y pedía perdón y Suki rezaba al costado por su alma.
En medio del trance por haber perdido su inocencia de la peor manera posible, Suiseiseki se levantó en silencio, salió del carromato pisando a los tres chicos caídos, tomó aire y lo llamó:
“¡¡¡¡¡PIÑIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIII!!!!!”
“Entonces, mis muy queridos cabros, si una persona dice “No”, ¿ustedi que hacei?”
“No hacemos nada”, repusieron todos, menos Suiseiseki, ahí sentados frente al líder de la caravana. Gracias a la muy desgraciada se habían ganado un sermón de tres horas y se encontraban al borde del suicidio.
“¡Muy bien! Ahora, si nadie queri besar al Jin, ¿qué debei hacer?”
“Decirle educadamente que preferimos la muerte”
“OYE”
“¡Exacto! Así que, cabros chicos, la próxima vez que hagái estas weás, recordai estas reglas para que todo salga lindi, cachai?”
“Cachado”, respondieron a su peculiar lengua sureña.
“Filo”, les dijo a todos a modo de bendición y luego al voltearse se cayó entre las piedras que estaban por ahí. Jin y Ueda fueron rápidamente a ayudarlo antes que les diera otro pinche sermón.
“Creo que deberían pedirle disculpas a Suiseiseki”, les dijo Liet al resto. “O sea, todos sabemos que igual Kame y Sui se van a casar (¿?) no hay por qué apresurarlo”.
“That’s true”, asintió Mizuki. “Sukergh, ve tú y pídeleh perdón de parte de todos”
“Claaaro, ¿para que ahora sea mi turno de que me raje la frente como a ti?”
“Gracias por tu comprensión”, le dijo con una sonrisa. “Ahora veh mi pequeñah y sacrifícate por nosotros u_u”
“,,l,,”
“Iré yo”, dijo Kame. “Quien verdaderamente debe disculpas por todo lo que pasó soy yo”.
“MEJOH TODO UN HOMBRECITOH YOY”
“Las estrellas están de tu lado”, le dijo Suki haciéndole la señal de la cruz.
Kame miró a Liet, quien simplemente se encogió de hombros y lo acompañó en silencio hasta el carromato que Suiseiseki compartía con la abuela. Luego de tocar la puerta fue la anciana quien abrió y les indicó que Suiseiseki se había ido a buscar bayas al bosque que estaba cerca de ahí, aprovechando que nadie la fastidiaría porque los sermones del Piñi parecían discursos presidenciales. El mayor entonces le pidió que le dejara ir solo y sin esperarlo, se fue caminando en dirección al bosque. Para su sorpresa, Suiseiseki se encontraba ahí cerca, sentada en el pasto, comiendo bayas y mirándolo.
“S-Sui… He venido a pedirte disculpas por todo lo que sucedió…”, la ojicolor se encogió de hombros.
“Si alguien tiene que pedir disculpas es Jin de meterme su lengua horrorosa que solo Kira sabrá dónde habrá estado metida”
“Sí, pero lo que hicimos con Suki y Mizuki tampoco estuvo bien…”
“Nah”, Suiseiseki le sonrió y un peso se le quitó de encima. “En realidad no me enoja, o sea, después de todo me están justificando para hacerles cosas aún peores en el futuro
”
“…”
“Y no te preocupes”, la ojicolor le dio palmadas a su costado indicando que se sentara junto a ella, lo cual hizo. “Tú sabes que no es que tenga algo en contra de ti, simplemente nadie me va a forzar a hacer algo que no quiero”
“¿Eso significa que…?”, comenzó esperanzado.
“Pues, todavía espero el día en que un rayo me caiga y me enamore de Liet”
“…”
“O quién sabe. Hoy día vi los abdominales de Ueda, ¿los habías visto alguna vez? Siento que en algún universo alterno fickearían sobre nosotros (¿?)”
“…”
“Pero mira el lado positivo. Jin es detestable, Liet es casi mi hermano y los abdominales de Ueda podrían desaparecer de la noche a la mañana…”
“¡…!”
“Aunque la manera en que Suki me besó, OH BOY”
“…”
“Y Mizuki tiene unas piernas que—”
“OK, CON MIZUKI NO, POR FAVOR”
“KAME, YO PODRÍA SER TU SEGUNDA MADRE OMG, TESORITO”
“NO”. Suiseiseki se rió y le dio palmadas en el brazo antes de levantarse con su cesta llena de bayas. Kame se levantó también y ofreció llevársela, pero la ojicolor se resistió mientras echaban a andar.
“Suficiente, una cosa es que estemos en buenos términos y otra es darle más motivos a la abuela para comenzar a preparar mi dote >(”
“Bueno, igual de nuevo, discúlpanos por todo. No quería que este día fuera tan mal”.
“Calma, ya fue suficiente castigo tener que descifrar qué rayos hablaba el Piñi”
“True”, rodó los ojos. “Quién sabe qué rayos habla ese tipo”
“Ese acento gitano del sur debería ser una nueva lengua de toda ley D:”
“Yo no sé cómo siendo poblaciones tan cercanas esa cosa mutó más allá de cualquier lógica”. Para ese entonces ya estaban a unos cuantos pasos del carromato de Suiseiseki. “Entonces… Nos vemos mañana”.
“Así es”, respondió la chica subiendo las pequeñas escaleras que ponían frente a la puerta por si la abuela deseaba salir en el día. Antes de entrar, sin embargo, se volteó a ver al chico. “¿Sabes? Si sigues tacleando a Jin de esa manera tan espectacular, las balanzas se inclinarían a tu favor. No hay nada que me ponga de mejor humor que ver a Jin al borde de la muerte”. Y entró sin decir más.
Suki (porque vamos, todos sabemos cuánto se muere por el desgraciado) tendría que perdonarle, pero si asesinar a Jin era la clave del éxito, las cosas nunca se habían visto más fáciles y divertidas.